La realidad aumentada es algo tangible y común hoy en día. Desde stickers AR hasta filtros faciales, vivimos en una época donde esta tecnología está al alcance de nuestras manos.
Pero en algún momento en el tiempo, la realidad aumentada era un concepto digno de la ciencia ficción.
Recordemos las películas que nos presentaron esta herramienta digital antes de que llegara a nuestras vidas.
Una de las primeras peliculas de realidad aumentada que pudimos ver es la Terminator 2, dónde el Terminator T-800 incluía programas de realidad aumentada en su software...
El robot asesino del futuro surge en el tiempo presente. Recién llegado de su viaje temporal, comienza a analizar sus alrededores.
Busca ropa y transporte para hacerse pasar por un ser humano en su misión para acabar con el líder humano del futuro.
Un acercamiento a sus ojos y estamos “dentro” de su cabeza. Vemos el ambiente como él lo hace.
Al ser cibernético, puede usar computadoras para analizar sus alrededores y obtener información: modelos de motocicleta, altura y peso de las personas que encuentra, detección de amenazas, etc.
Al igual que su contraparte asesina de Terminator, el oficial androide Alex Murphy también cuenta con visión de realidad aumentada.
Sin embargo,éste presenta otros ejemplos de las capacidades de esta tecnología: puede analizar el nivel de estrés en la voz a modo de detector de mentiras, puede usar visión térmica para identificar objetivos ocultos y también cuenta con una base de datos de reconocimiento facial con los criminales de la ciudad.
Esta es una de nuestras peliculas de realidad aumentada favoritas, no sé si recuerdas esa escena cuando Tony Stark se encuentra de nuevo en su taller, en la primera película de Iron Man, puede ordenar a su computadora JARVIS que proyecte un área de trabajo holográfica.
En ésta, el puede reacomodar la información tridimensionalmente a su alrededor, girar, agrandar o hacer pequeñas ventanas, combinar elementos, etc.
Todo con interfase manual, donde se detecta la rotación de sus manos y la posición individual de sus dedos.
Es una muestra de lo que la realidad aumentada puede hacer; aunque todavía falta un poco para alcanzar ese nivel, pero avanzamos a pasos agigantados...
Hoy en día, existen equivalentes de estas visiones cinematográficas de la realidad aumentada. En el primer ejemplo, tenemos su análogo en Google Lens.
Esta aplicación de Google puede detectar texto, códigos de barra o QR, especies de animales o plantas y hasta puede buscar la imagen en diferentes sitios de compras en línea:
En el caso de Robocop, sus análogos actuales son los sistemas de reconocimiento facial en las cámaras de seguridad de ciertas ciudades.
En EE.UU. Chicago y Detroit, algunas agencias de seguridad han comenzado a utilizar estos sistemas para reconocer personas entre multitudes. También en Asia ha comenzado pruebas de este tipo de medidas.
Por último, la tecnología de Iron Man ya existe pero en una implementación distinta.
Gracias a los visores de realidad aumentada, podemos manipular interfaces de usuario y recibir información relevante a través de ellos.
Un ejemplo de esta herramienta son los Holo Lens 2 de Microsoft, que permiten proyectar objetos 3D sobre superficies y manejar ventanas como si fuese el escritorio de nuestra PC.
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