Las clases inmersivas están moviendo el mundo; porque están transformando, radicalmente, la manera cómo las escuelas presentan sus proyectos de enseñanza-aprendizaje
Muchas veces hablamos sobre realidad virtual, vemos videos o leemos artículos; pero realmente en ninguna de estas opciones traduce de forma fidedigna la experiencia de usar esta tecnología. Literalmente, para entender la VR, debemos vivirla a través de un visor.
Cuando nos colocamos estos lentes especiales es cuando nuestros sentidos realmente pueden apreciar el alcance de esta tecnología inmersiva.
La universidad de Stanford ha entendido esa necesidad y por lo mismo ha creado una clase inmersiva que se dedica a experimentarla de primera mano.
Conozcamos el día de hoy cómo este curso está ayudando a los futuros comunicólogos a entender de verdad este medio.
El profesor Jeremy Bailenson imparte la clase de Comunicación 166, dónde se estudian los diferentes ángulos de esta tecnología y sus aplicaciones prácticas. Bailenson es además autor de un artículo sobre VR denominado "Experience on demand" (Experimenta a libre demanda), cuya lectura está incluida dentro del plan de estudios de esta clase.
El maestro es muy claro en la misión de su clase para sus alumnos:
"La realidad virtual llega cada vez más a un público generalizado, siendo utilizada en más de 10 millones de dispositivos sólo en los Estados Unidos.
Esta clase examina la realidad virtual desde el punto de vista de diferentes disciplinas, incluidas la cultura popular, ingeniería, ciencias conductuales y comunicación.
Cada estudiante recibirá un visor Quest 2 y la mayor parte de esta clase será impartida dentro de un ambiente VR."
Además de todos los estudios que se realizarán durante el curso bajo la supervisión del profesor, los alumnos también participarán en actividades dentro del tiempo de clases donde podrán experimentar la realidad virtual individualmente o en grupos de estudio.
Dichas labores incluyen desde ver un video de 360 grados de forma individual, hasta atender una clase de yoga virtual (en equipo) dentro de la aplicación Altspace.
De acuerdo con datos de la universidad, el curso en 2021 incluyó 263 alumnos que utilizaron su propio equipo de realidad virtual y compartieron más de 200,000 horas dentro de estos ambientes virtuales.
La implementación de este tipo de clases ha llamado la atención hasta en las esferas más altas.
El mismo Mark Zuckerberg ha demostrado interés en este curso, mencionando que todos los alumnos emplean el visor de su compañía (Quest 2).
La universidad de Stanford ya tiene amplia experiencia en el uso de realidad virtual. Se dice incluso que su aplicación Stanford VR Experienced fue tan bien diseñada que formó buena parte de la decisión de Zuckerberg para comprar Oculus en 2014.
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